Top 5: Sabores de la cocina argentina
De sobra se sabe que el dulce de leche es tan argentino como el asado o que la tradición del café o té entre amigos se mantiene tan viva que resulta tierno pasar por un restaurante a eso de las cinco de la tarde para nada más observar el ritual de abuelas o chicas a la mesa, charlando, riendo y por supuesto, ¡comiendo!
En Buenos Aires, capital argentina, hay ciertos códigos al momento de comer; tanto así que por cada cuadra hay mínimo dos sitios que ofrecen desde las clásicas porciones de pizzas hasta las respectivas empanadas para calmar el hambre mientras se termine la jornada diaria de trabajo.
Los platos también van mutando con las estaciones, así como cambiamos la ropa en el armario cuando se aproxima el invierno; la cocina argentina también cambia a medida que llega el invierno o la primavera.
Pero, hay sabores que son fijos y que sin importar códigos o temperaturas son verdaderos clásicos de la cocina argentina.
Medialunas con café con leche para el desayuno
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Un día en Buenos Aires inicia con dos medialunas y una buena taza de café con leche o un cortado, si se necesita más dosis de cafeína.
Las medialunas pueden ser de manteca o grasa, rellenas con crema pastelera o con jamón y queso. Lo importante es que estén frescas, suavecitas y crujientes.
Milanesa con fritas para el almuerzo
Las milanesas de carne o pollo te la venden ya listas hasta en la carnicería o el súper mercado. Sólo es cuestión de echarlas al aceite caliente con unas cuantas papas y listo, ¡mesa servida!
Se comen para el almuerzo o la cena y también tienen variaciones en sus complementos: puré de calabaza o zanahoria, huevos fritos o una capa de jamón, queso y rodajas de tomate puede ser una sabrosa opción.
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Ravioles de ricota y espinaca para la cena
No importa si es verano y el sol abrasa, en Argentina se come pasta a diario y la de ricota y espinaca es divina, más si la acompañas con una riquísima salsa blanca.
Más allá de Buenos Aires, hacia el sur del país la tradición de pastas caseras incluye un ingrediente muy silvestre: la carne de ciervo. Por ejemplo, en Bariloche se come uno exquisito.
Asado para la juntada del domingo
Cualquier terraza argentina se ocupa el domingo para la juntada de amigos, familiares o vecinos del barrio que encuentran en la preparación del asado un ritual colectivo protagonizado por el sabor más jugoso y nacional de todos: la carne.
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En un auténtico asado no falta la salsa criolla o el tradicional chimichurri para sazonar carne, chorizos y morcillas.
Un buen tinto es el mejor acompañante.
Flan casero con dulce de leche
La pastelería argentina tiene reconocimiento mundial por su fusión europea y sus formas artesanales en la preparación. Si viajas a Buenos Aires verás muchas escuelas destinadas a la formación de futuros pasteleros y panaderos profesionales y la mejor forma de averiguar qué tan exitosas son es animándose a probar.
Pasta flora, bizcochos rellenos de frutas, trufas, alfajores y sobre todo, un dulce flan casero servido con dulce de leche y crema es la manera más deliciosa de cerrar una cena o comida en casa.
